En octubre de 2011 Samsung creó el término Phablet (cuyo significado proviene de phone-tablet). Era una mezcla entre tablet y smartphone. Pero no fue hasta el lanzamiento del Samsung Galaxy Note IIcuando realmente este tipo de dispositivos se asentó en el mercado. Fue tal la irrupción de Samsung que en aquel momento casi todos los fabricantes más grandes habían incluido ya un phablet en su catálogo o estarían produciéndolo.
Estos dispositivos pasaron de portar una pantalla de 5,3 pulgadas –el Samsung Galaxy Note original– a pantallas de 6,95 pulgadas como el Cube Talk 69 o 6,8 pulgadas como el Hisense Z1 –llegando a plantearnos si ya realmente tenemos azulejos en el bolsillo o móviles–.
Pues bien, en el último IFA –desarrollado durante este año–, Samsung, uno de los principales protagonistas del evento, presentó una nueva versión del Samsung Galaxy Note llamada Edge,smartphone con la intención de hacernos mucho más fácil el uso del móvil en el día a día –y parece que lo hará, pues aumentamos el tamaño útil de la pantalla quitando elementos e introduciéndolos en la pantalla secundaria–.
Si bien esta nueva versión se ha incluido dentro de la gama Galaxy Note, es posible que se mude a otras gamas como la Galaxy S o incluso puede que se incluya también en versiones de gama media y gama baja –por lo que es posible que esta utilidad llegue a muchas versiones de Samsung para que personas de todos los gustos puedan usarlo–.
Al igual que ocurrió con el phablet, no sería de extrañar que de aquí a un par de años este nuevo tipo de dispositivos se asiente en el mercado y sea lanzado por otras marcas –no en las primeras versiones, sino en algunas más avanzadas, como ocurrió con el Samsung Galaxy Note–.
Personalmente, ¿veis futuro a esta nueva gama de dispositivos?
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